lunes, 28 de octubre de 2013

Número 60

PREMIO JOSÉ LUIS SAMPEDR0

PALABRAS NO RITUALES DE ANDRÉS SOREL AL RECOGER EL PREMIO
PALABRAS ENTRAÑABLES DE ANTONIO GAMONEDA


El pasado martes 22 de marzo se me concedió el Premio José Luis Sampedro en el curso del festival Getafe Negro, en la Universidad Carlos III de dicha localidad, por, según rezaba  el fallo: "su trayectoria creadora y un nivel de excelencia y/o originalidad sobresaliente. Y la inserción de su obra en la tradición humanista que impregna la cultura y la creación, convirtiéndola en un factor de reivindicación de la dignidad y la riqueza espiritual de los seres humanos".
 
En mi intervención subrayé una doble anomalía que me acompañaba en esa circunstancia: la primera es que jamás antes había obtenido premio alguno. Tampoco me he presentado a ninguno, incluyendo éste. La segunda es que en mi larga vida, en la que he pronunciado cientos de conferencias en distintas ciudades del mundo, nunca había leído un papel. Por primera vez leería una cuartilla. Era mi sucinta protesta a cuanto nos rodea en los actuales días que vivimos.
Pensé que en momentos como éste es cuando un escritor debe mostrar su verdadero compromiso, y que al tiempo que yo hablaba muchos responsables de nuestra degradada situación económica, social, cultural estaban en tribunas públicas, en la televisión, en actos gubernamentales o de partido retorciendo el lenguaje para utilizarlo al servicio de sus interminables corrupciones, para golpear con su distorsión y falseamiento las mentes de los ciudadanos a los que buscan convertir en esclavos: no importa que ahora seáis víctimas de nuestra explotación, si os resignáis, pronto os daremos una limosna, quieren decirles los Guindos, Botines, Montoros, Cospedales,  Rajoys, empresarios de turno, con sus malditas verborreas de neo analfabetos.
Reproduzco las palabras que me escribió para la lectura en el acto, que no se leyeron, Antonio Gamoneda, y las que yo mismo leí, de forma escueta, directa, sin prolegómenos ni  comentario alguno. 
 
PALABRAS DE ANDRÉS SOREL
 
 
La auténtica patria del escritor es la lengua en que escribe. En el año 1945 algunos escritores, Paul Celan, Ingeborg Bachmann, Adorno, entre otros, comprendieron que su lengua había sido sacrificada por los genocidas y burócratas alemanes que provocaron el mayor holocausto de la Historia. Tenían que construir una lengua nueva purgando las palabras que la desarrollaran
Hoy, en otras circunstancias, que a algunos escritores nos llenan de zozobra y angustia, vivimos bajo el atropello, prostitución de nuestra propia lengua. Se utilizan procedimientos más propios de Goebbels que de la riqueza de uno de los idiomas más creativos del mundo, para impartir mensajes y alienar a los ciudadanos. Perversión de contenidos, modos populistas, alteración de significados, palabras quemadas: cada palabra, un cadáver de su prístino origen, un intento de extinción del pensamiento. Como escribió Celan:
busca la nube palabras y llena el cráter del silencio.
Lo inexplicable recorre, en voz baja, el país.
Muchos responsables de las industrias culturales y de la política vulgarizan el lenguaje, lo deforman hasta límites en los que resulta imposible reconocer su acepción, su música oculta, su búsqueda de la belleza. Su razón de ser. Y el escritor debe rebelarse contra estas perversiones si quiere sobrevivir y no ser aniquilado por este holocausto de la cultura. El escritor ha de regenerarlo, dignificarlo, purificarlo.
Un premio amparado bajo el nombre de José Luis Sampedro, un hombre y un escritor honrado en la más profunda estela machadiana, un escritor y un hombre de los más honestos y profundos creadores de nuestro tiempo, es, sin duda, el mejor, casi podría decir el único premio que me han concedido en mi vida, y me reconforta y anima a seguir luchando por la palabra y la libertad, no solo mía, sino de los ciudadanos a quienes se pretende esclavizar en su pensamiento, diferencia y dignidad humana.

PALABRAS DE ANTONIO GAMONEDA

Querido Andrés, querido hermano mayor, si no en edad, sí en la dignidad que únicamente concede la conciencia realizada en actos de creación, de limpia justicia, de generosidad y de solidaridad.

Ayer, ya bien tarde, regresé de un congresillo lejano sabiendo de ti. Sabiendo de ti porque vine leyendo  Ultimo tango en Auschwitz. No es poco, que es mucho, pero no sabía nada más.

Y hoy, a las 19,35, por esa vía que llaman electrónica, o digital, o algo parecido, me entero de que mañana, a las 12,30, te entregan el Premio "José Luis Sampedro", en razón, entre otros motivos que yo bien sé, de tu "trayectoria creadora, de su nivel de excelencia (y de la reivindicación que comporta) de la dignidad y la riqueza espiritual de los seres humanos".

Aunque esta noche aprendiese a volar, no llegaría a tiempo de abrazarte antes ni después del momento en que te será entregada esta señal de reconocimiento, vinculada, precisamente, al querido nombre de José Luis Sampedro. Ningún otro nombre podría acoger ni representar mejor la calidad de tus méritos, de tu manera de estar y ser en esta difícil circunstancia (cada día más) consistente en vivir.

¡Qué le voy a hacer! Pienso en ti como debo hacerlo, con fraternidad y gratitud. Y te abrazo, te abrazo.
                                                             Antonio Gamoneda

 

martes, 8 de octubre de 2013

Número 59

El Estado de la Nación (5)

Cospedal sustituye salarios por misas. El País habla de Blesa.  La justicia y la corrupción.

Leyendo la prensa y su diaria labor de zapa con la información, el lenguaje, la crítica. La prensa cada vez más dependiente de los monopolios económicos y poderes políticos que la mantienen. Existen excepciones, reducidas en su mayoría a las que se acogen a espacios de Internet o a semi clandestinas publicaciones, que el mundo de la edición, la distribución y la venta cada vez es por desgracia más homogéneo y cerrado. Mientras, como informa Público -que también como diario de papel sufrió la presión económica hasta provocarle el cierre-  en 2012 se cerraron 89 medios de comunicación y 5.000 periodistas pasaron al paro o al limbo. Claro que no dejan de existir conformistas o bien adoctrinados jóvenes formados en las Universidades católicas para sustituirles: y sus caras y servilismo, para lo que manden, pueden contemplarse y escucharse cada vez más en los reconvertidos medios -al servicio del neo franquismo- como TV y Radio Nacional.
 
COSPEDAL SUSTITUYE SALARIOS POR MISAS.
 
No dejará de sorprendernos nunca, en sus discursos y en sus medidas legislativas, este rostro de diseño que parece entresacado de una de las figurantes de las tablas religiosas que adornan muchos retablos eclesiásticos, y que encarna al tiempo más allá de su forzada sonrisa y de sus ojos tan trasparentes como reflectantes de la seguridad de los más burócratas represores de las ideas con sus argumentos y decisiones a un ángel del mal. Esta falsa y aparente belleza  se da en múltiples personajes a los que la Historia acabó juzgando en su verdadera identidad represiva por sus argumentos y decisiones. Bello era, por buscar no un parangón sino un reflejo de la memoria histórica, Heydrich, y culto, y de seguro amado por muchos de sus súbditos y contemporáneos. En el reflejo de Cospedal lo que encontramos son los ecos que ilustran poemas como el de Antonio Machado: España de charanga y pandereta, cerrado y sacristía. En este caso España de peineta y fiestas taurinas, Parlamentos sin palabras y religión por todas partes..
Sus últimas propuestas -que tal vez fracasen por falta de esa aceptación popular que tanto busca y jalea ella con su lenguaje mendaz y repetitivo como imponía una de las tácticas goebelianas para que pase del inconsciente colectivo a la aceptación de los pobres alienados- es la de compensar ausencias del trabajo por asistencias a misas -y suponemos que posteriormente procesiones, romerías, peregrinaciones y otras fiestas de culto: unos conforman la masa y el coro de mudos receptores de los esperpentos rituales y otros, los menos, apañan los dineros que les deja su organización. Hora y media de dispensa para trabajar por asistir a una misa en Toledo. Si los funcionarios se ponen enfermos -o participan en huelgas reclamando sus esquilmados derechos- se les descuenta de su salario el tiempo que no trabajan. También se reducen médicos y auxiliares para intentar paliar sus enfermedades y medicinas para el cuerpo, pero se incrementan sacerdotes y beneficios para ellos para que puedan envenenar el alma. Dejan que se extingan los cuidados y mermen medicamentos a los ancianos, pero no se reducen los servicios de los buitres que merodean alrededor de los agonizantes para "atenderles" en su último suspiro.
Cospedal: genio y figura, pueblo español, hasta vuestra sepultura.
 
EL PAÍS HABLA DE BLESA
 
El diario, cada vez más inclinado hacia uno de los poderes económicos que le sustenta -inversores norteamericanos, basta seguir sus páginas de información y opinión sobre América latina-mantiene ,claro está, la cuota de izquierda necesaria para no desdibujarse del todo, como decía mi querido y no olvidado amigo Manuel Vázquez Montalbán, dedicaba el sábado 5 de octubre casi una página a hablar de Blesa. Nos sumergimos no asombrados, que ya nada puede asombrarnos de cuanto encontremos en este periódico, en su lectura. No espere descubrir el lector análisis rigurosos, informaciones contrastadas, comparaciones explicativas que sirvan para explicar el desarrollo de la economía y la política en nuestro país en los últimos diez o quince años, tampoco señalamiento de tan infausto personaje, en la estela del gran jefe Rato, como uno más de los culpables del retroceso violento y tal vez irrecuperable que estamos sufriendo, no solo en niveles de vida, sino en aspectos esenciales que tienen que ver con la educación, la sanidad pública, la cultura, los derechos individuales, las libertades públicas, no, no: se trataba de glosar la segunda boda de este siniestro personaje y mostrar así el poder de "convocatoria" para su clase social de uno de lo aliados y enchufados de Aznar en su privada y siniestra ceremonia que congregaba a personajes cuyos millones -depositados en gran parte fuera de España- olvidan interesadamente los responsables de economía y hacienda que existen y han contribuido a la esquilmación colectiva que a través de los bancos y grandes empresas han provocado la ruina de esa España cuyo nombre les llena la boca. Como siempre, se acompaña el diario de desinformaciones semejantes de cuadernillos de colorines y papel couché que harán la delicia de la cada vez más aislada y poderosa clase pudiente que se encuentra plenamente satisfecha de medio semejante que al fin decidió sentar la cabeza entre quienes pueden gastarse el dinero en medios cada vez más vueltos de espaldas a trabajadores de cualquier índole. Un país para aprovechados zánganos de lujo de ese país..

La justicia y la corrupción.

Un simple corolario. ¿Desde cuando los defraudadores, las gentes de extrema derecha no ignoran que la justicia termina siempre suavizando sus leyes con ellos? Decenas de casos y de personas -algunas inculpadas en asesinatos políticos, las más en corrupciones de alcances gigantescos- no tardan en ser puestos en libertad. Basta leer las noticias de cada día. ¿Y hasta cuando la farsa?
 

La Linterna del S. XXI